
El gol que nos hacen es culpa directa de Martínez y el chico Reyes. El “Salvaje” salta a la nada, un golpe de cabeza al vacío. Un jugador que realmente no ha marcado la diferencia o se ha contagiado de la mediocridad general. Martínez salta y no le da a la pelota; error garrafal para un jugador profesional, más aún para un defensa central.
Por otro lado, el chico Reyes se confió en que Martínez iba a despejar el balón y descuido su marca (a Ronald Quinteros, quien finalmente anotó ante el buen Libman). Un defensa JAMÁS debe dejar su marca, ni siquiera cuando el compañero está en mejor posición o cuando el arquero tiene aparentemente controlada la situación. Un defensa tiene que estar siempre cubriendo el error del compañero. Ojalá este error le sirva como experiencia al menos, porque condiciones tiene. De él depende llegar lejos o ser uno más del montón.
San Martín fue más pero el gol nos lo hicimos nosotros mismos. Páez, has algo con esa defensa antes que acompañemos a Boys a Segunda.
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